Sobre Teorías de Conspiración y Conspiranoícos
Introducción
Es menester que estemos claros e indicar que en lo que a mí concierne, no hay tal cosa como Teorías de Conspiración y sí conspiraciones gubernamentales, políticas, científicas y religiosas. Las élites gobernantes con tal de perpetuarse en el poder, no tienen ningún tipo de problema en cometer actos execrables en contra de sus propios constituyentes. Después utilizan el eufemismo “Teoría Conspirativa” para desacreditar aquellos que descubren su faena y barrer el piso con ellos.
La probabilidad de las Conspiraciones Gubernamentales para aquel que aún confía en los gobernantes o que pertenece a algunas de sus estructuras es un absurdo (aunque la realidad siempre superará a la ficción o cualquier artilugio mental). Estas personas expresan que “todos sabemos que los gobiernos (incluyendo el nuestro) son muy buenos, nunca mienten, jamás cometen crímenes, fraudes o conspiran en contra de los ciudadanos’’
La gran mayoría entiende que el Estado, las empresas y organizaciones, sólo planifican cosas edificantes y dirigidas al bien de la comunidad o al grupo que sirven y no están interesados en estructurar nada malo o delictivo.
La idea del conspiranóico, esa que reza que “los gobernantes pueden son capaces de mentir descaradamente, conspirar y que existen grupos de poder con una agenda muy particular de manipularlo y controlarlo todo” no le cabe en la cabeza a muchos.
Orígenes etimológicos del término
El término conspiración viene del latín (conspiratio, conspirationis). Está formado por el prefijo ‘con’ que indica unión, el verbo ‘spirare’ que significa respirar, vivir, anhelar o estar ávido de algo y por último del sufijo ‘cion’ que indica acción o efecto. Uniendo los lexemas tenemos entonces “un grupo de personas que están ávidas de algo o lo anhelan y planean una acción para lograrlo”
Una agencia de espionaje y guerra psicológica
Es muy probable que el término Teoría de la Conspiración, haya surgido y fuese acuñado originalmente por la Central Intelligence Agency (CIA).
Así se desprende del documento de la Agencia # 1035-960 del año 1967. Todo esto enmarcado dentro de la vorágine que desató el asesinato de John F. Kennedy en 1963; y que salpicó a muchas de las estructuras gubernamentales estadounidenses incluyendo a la CIA.
Ese documento, con fecha del 4 de enero 1967, y marcado "PSYCH", es decir parte de una operación de Guerra Psicológica, aconseja y adoctrina a los agentes de la CIA para luchar contra los críticos del Informe Warren (comisión creada para investigar el magnicidio) mediante el uso de “amigables contactos de élite de enlace” (especialmente para con políticos y editores)" y de “emplear los activos de propaganda para contestar y refutar los ataques de los críticos”
Se utiliza en el documento constantemente el término ‘Teoría de la Conspiración’ y ‘Teóricos de la Conspiración’ como una especie de insulto para desprestigiar a todos aquellos que no se tragaron el ‘cuentito’ del tirador solitario y a los que cuestionaban y dudaban de los resultados del Informe Warren.
Conclusión
Los gobiernos a diario conspiran para esquilmar al pueblo, adelantar sus agendas, despojar a otros países de sus riquezas y cometer toda serie de atrocidades en contra de los mismos. Hay decenas de conspiraciones gubernamentales que han pasado a convertirse en “Teorías de Conspiración” y de las cuales existe evidencia abundancia de intervención directa de los que gobiernan. Por mencionar algunas están:
El magnicidio de John Kennedy,
El asesinato de su hermano Robert
La Guerra Hispanoamericana
El caso White Water
El asesinato de Vince Foster
Los bombazos de Oklahoma
Los bombazos de Boston
El Ataque a Charlie Hebdo en Paris
El derribo de las Torres
La muerte de los astronautas del Challenger
La intervención rusa en las elecciones de EU
La guerra civil Siria
La Primavera Árabe
Isis y Al Qaeda
Cada vez que alguien protesta o expresa “esto no me cuadra, tengo interrogantes, tal vez eso no fue así o debe haber una explicación alternativa” salta el coro gubernamental y los ‘dormidos’ a voz en cuello gritando, “son unos conspiranóicos eso es una teoría de la conspiración etc.” Utilizando un término de guerra psicológica, inventando por el aparato de espionaje más grande del planeta, sólo superado por el de los Jesuitas del Vaticano.
‘Teorías de la Conspiración’ es un alucinógeno de la CIA mucho más potente que el DMT. Aquel ‘que va dormido soñando que está despierto’ lo utiliza de manera muy festinada y alegre para desacreditar a aquellos que por una u otra razón sacuden su paradigma y zona de confort. Repiten como el papagayo lo que el establishment creó, con el único propósito de manipular, desinformar y moldear su percepción.
Así que si el término fue acuñado por los espías más desacreditados del planeta hace medio siglo, un viejito de 63 siempre asumirá una actitud de suspicacia cuando alguien le endilga el mote a cualquier evento (sin entrar en la parte sustantiva).
